Viña Laura Hartwig es una bodega boutique y familiar, nacida de un sueño de jubilación. Todo comenzó en 1978, cuando **Alejandro Hartwig** y su esposa **Laura Busquertt** decidieron plantar vides en sus fértiles campos de Santa Cruz, Valle de Colchagua, tras la experiencia de Alejandro como un apasionado conocedor de vinos durante su estancia en Canadá. Inicialmente, vendían sus uvas de alta calidad a grandes bodegas.

Motivados por el éxito de sus uvas, en 1994 construyeron su propia bodega y lanzaron su primer vino en 1995: un Cabernet Sauvignon Reserva que marcó su entrada al mercado. La viña fue bautizada en honor a Laura. Hoy, son la segunda generación —los hijos de Laura y Alejandro— quienes están a cargo del campo, manteniendo la visión de sus padres de producir vinos que reflejen fielmente su origen y la calidad de Colchagua.

Su filosofía es poco intervencionista y de producción a escala humana, permitiendo que aspectos claves sean manejados directamente por la familia. Este enfoque garantiza vinos de la más alta calidad, elegantes y con una fuerte identidad de Colchagua. Trabajan incansablemente para lograr una perfecta armonía entre la vid y su entorno, expresando en cada botella el respeto por la tierra y la dedicación familiar.

Ubicada en el corazón del Valle de Colchagua, en Santa Cruz, la viña cuenta con 145 hectáreas plantadas. Las condiciones climáticas son ideales para las variedades tintas, con suelos que favorecen la concentración y elegancia:

• Terroir: Clima mediterráneo semiárido, con gran amplitud térmica diaria.
• Suelos: Principalmente de origen aluvial y coluvial, con buen drenaje, lo que induce un estrés moderado en las parras, concentrando la calidad de la fruta.
• Prácticas: Manejo detallado del viñedo, con enfoque en la madurez y sanidad de la uva.